ESCUELA DE VERANO PARA NIÑOS SUDANESES

Queridos amigos: perdonadme por no haber compartido con vosotros desde hace casi un mes La verdad es que la escuela de verano para los niños sudaneses me ha tenido muy ocupada, y el calor es tan fuerte que nos deja con pocas fuerzas para trabajar en la noche.

Cada año la escuela organiza un  mes  de escuela de verano para evitar que los niños y niñas permanezcan encerrados en casa por  dos meses seguidos. Sus padres salen a trabajar muy temprano en la mañana y regresan en la noche…. Hemos tenido varios casos de accidentes serios en casa durante la ausencia de los mayores..

Este año lo hemos tenido desde el 26 de Junio hasta el 26 de Julio. Durante este tiempo intentamos que los niños mejoren su conocimiento de la lengua Inglesa y que puedan profundizar algunos valores como la fraternidad, la reconciliación, la paz, el dialogo. El logo de este año era : ONE PEOPLE DIFFERENT COLOURS ( un pueblo, colores diferentes).

 Todo esto lo hacemos  a través de la música, el baile, el deporte, el arte y el drama.  Intentamos también que estos niños conozcan la geografia y tradiciones del pueblo egipcio y  al mismo tiempo que conozcan su tierra de origen y sus diferentes tradiciones  y valores. Ciertamente todos o casi todos prefieren la música, la danza y el deporte…Muy pocos se entusiasman en el estudio de la lengua Inglesa. Para ellos es muy importante aprenderla porque es la lengua oficial de su nuevo pais: Sudán del Sur, donde un dia regresarán.

Un momento muy importante cada dia es su inicio, donde rezamos, cantamos los dos innos nacionales  ( del Nord Sudán y del Sur Sudán) y hacemos un  poco de “ ejercicios” a través del baile o de educación fisica!  Al final de ese momento ya no tenemos gente medio dormida o perezosa , todo el contrario! Incluso los profesores terminan de despertarse, y yo también ciertamente!

Otro momento importante y muy deseado es la excursión a un  parque de atracciones donde pueden jugar . Ese dia corrian como si no les fuese a dar tiempo de subirse en todos los juegos, y  reian en continuación! No oiamos otra cosa que sus risas y sus gritos cuando se subian en la montaña rusa o bajaban por el tobogán ¡ Fue una gran gozada verles divertirse tanto y con poca cosa.

Un dia organizaron una partida de futbol entre chicos y profesores y otro entre chicas y profesoras. Me pidieron que jugase yo con las maestras pues ellas eran pocas. Lo hice con ganas no obstante el calor y el sudor. Terminé agotada y con algo menos de peso! Vinieron a felicitarme por haber jugado muy bién! Ha sido mi primera partida de fútbol en 52 años! Me consolé viendo que los profesores, mucho más jóvenes que yo, estaban  también agotados   después de la partida.Lucia  Fonts ha compartido con nosotros la primera y la última semana. También ella jugó muy bien al fútbol!

En la última semana nos dedicamos  a preparar el baile, canto, drama, juego o baile que cada grupo presentaba al resto de la escuela en la fiesta de cierre del curso. Fue un momento muy lindo, participado y gozado por todos, alunnos, profesores, padres y otras personas amigas.

Los maestros y yo hemos dicho: gracias a Dios que acabó…. Pero los niños han dicho: que pena que no podemos seguir otro mes más ¡  Ellos estarán todo este mes de Agosto encerrados en casa. Asi es la vida.No tenemos profesores o voluntarios y recursos para tenerlos en clase todos los meses del año.

Ahora descansaré por unos 10 dias antes de volver a empezar a preparar el nuevo años escolar.  Me hubiera gustado compartir con vosotros algunos videos que he  hecho de este curso pero no consigo descargarlos.Lo intentaré en facebook. Un fuerte abrazo para todos. Sigamos rezando mucho por la Paz en nuestro mundo ….Sudán, Siria, Egipto, Congo…y seamos cada dia más instrumentos de Paz.
 http://www.facebook.com/video/video.php?v=4352989661284

60 AÑOS DE VIDA COMPARTIDA CON EL PUEBLO SUDANÉS

60 AÑOS DE VIDA COMPARTIDA CON EL PUEBLO SUDANÉS

Sor Giuseppina Margoni

86 años, Sudan

Comunidad de Arco 

Sor Giuseppina nace en Villazzano l 20 de enero de 1924. El 17 de octubre de 1947 comienza el noviciado en Verona. El 2 de mayo de 1948 fue su toma de hábito. Un día, después de un año de noviciado transcurrido con otras  120 novicias, la vicaria, trentina (de Trento), la madre Afra Manzana, anuncia que cuatro de las 120 novicias irán a África para continuar en el Noviciado internacional de Jartum, en Sudan. Una de estas cuatro fue precisamente Sor Giuseppina. El 5 de mayo de 1949 comienza el interminable viaje que duraría 18 días, primero en barco desde Nápoles a El Cairo, luego en tren, luego de nuevo en barco por el Mar Rojo, y en fin de nuevo en tren hasta su destino. El 3 de mayo de 1950, es el día de su profesión religiosa. Desde entonces, salvo por breves regresos a Italia, Sor Giuseppina transcurrirá en Sudan toda la su vida de compromiso misionero.

¿Cuáles han sido los momentos más bellos de tu vida misionera? 

Entre los momentos bellos recuerdo el día de mi profesión  religiosa, que tuvo lugar junto con otras cuatro hermanas en Jartum el 3 de mayo del año santo de  1950. Cierto,  junto a la alegría estaba también  viva la gran nostalgia por mis papás lejanos, que no podían estar presentes. Otro momento bello fue cuando me asignaron mi primera misión fuera de Jartum, en contacto directo con la gente necesitada de todo, refugiada allí para huir de los horrores de la guerra que arreciaba en el sur del país. 

Y ¿los más difíciles?

Fue el momento de la expulsión de todos los misioneros en el 1964. Mientras el Gobierno sudanés preparaba la expulsión de todos los misioneros del Sudan, el Obispo Mons. Baroni nos invitó a rezar para no ser expulsados todos. Después que los chicos de la escuela y sus familias, incluidos los musulmanes, firmaron una petición en nuestro favor (no puedo dejar de pensar en aquellos sudaneses como en verdaderos instrumentos de Dios) el Gobierno atenuó su decisión y limitó la expulsión a los misioneros del Sur Sudan, así al menos los del Norte pudimos permanecer. 

¿Cuáles son las cosas más bellas que los misioneros traen a  Sudan?

Seguramente la promoción humana, pero sobre todo el mensaje del Evangelio, la esperanza de un mundo que puede ser mejor, el amor mutuo incluso entre personas de tribus diferentes.

¿Y las que los sudaneses dan a sus misioneros?

La gratitud, incluso de parte de los musulmanes, las vocaciones locales, la ayuda mutua también de los musulmanes, la confianza en Dios en toda situación, incluso la de pobreza y de pruebas extremas, la consciencia de que El sabe lo que sucede, una actitud esta que acomuna a todos los sudaneses, cristianos y musulmanes.  

“Salvar África con África” Hna. Maria de los Angeles Martinez Chavez

Soy María de los Ángeles Martínez Chávez, originaria de Sahuayo, Michoacán, México. Hice mi Primera Profesión religiosa misionera el 8 de diciembre de

1990, en el Instituto de las Misioneras Combonianas. Los Votos Perpetuos los realicé el 2 de mayo de 1999. A inicios de 1991 me fui a Portugal para estudiar Teología pastoral. En 1994 fui asignada a la misión de Mozambique; en el 2005 regresé a Portugal para sacar la licenciatura Ciencias Religiosas y en el 2007 retorné nuevamente a Mozambique para continuar con mi labor misionera.

Desde que llegué a Mozambique mi trabajo ha sido en el campo de la pastoral formando líderes, según la metodología de nuestro Fundador Comboni, de “Salvar África con África”. Otro trabajo importante que he estado realizando en la población de Capira, es la educación en la escuela preparatoria técnica, enseñando educación moral y cívica.

Allá en Capira tenía la dirección del centro catequético diocesano en colaboración con los misioneros combonianos. Toda la semana la dedicaba a formar líderes y los fines de semana me iba a las parroquias del interior del campo; salía el viernes en la noche para regresar el domingo por la tarde. En esas salidas reunía a la gente para darle curso de formación integral.

Nos interesaba educar a todos, por eso donde no había escuelas y por ende había analfabetismo se organizaban “las escuelitas comunitarias” para brindar educación del primero al quinto año de primaria; para los siguientes grados de escolaridad se mandaba a las personas a otro lado a estudiar pues eso pedía el gobierno.

Al darnos cuenta de que las chicas se casaban demasiado jóvenes quisimos abrir internados para ellas. Las chicas interesadas en estudiar y que no tenían medios económicos para hacerlos eran admitidas en nuestros internados. Cuando ellas llegaban a grados de escolaridad más avanzados se les enviaba a la Escuela Femenina, la cual ofrecía formación técnica. Por supuesto que allá llegaban las jóvenes que verdaderamente estaban interesadas en seguir adelante con sus estudios. Otras chicas optaban mejor por casarse.

Lo que más me gusta de mi trabajo en la misión

Me gusta mucho trabajar tanto en la educación como en la pastoral. Me entusiasma contribuir en la formación bíblica de líderes. Sí, nos interesa que los líderes tengan bases bíblicas en la formación que les ofrecemos. Vimos que antes de llevar a cabo este tipo de formación la gente se inclinaba más por las cuestiones devocionales descuidando el aspecto bíblico, por eso ahora insistimos en la formación basada en las Sagradas Escrituras, sin quitar lo devocional. Notamos que como experiencia de liberación era mucho más importante para el pueblo la formación bíblica. Aquellos que se convierten y tienen sus bases en la Biblia y Jesucristo experimentan una liberación muy grande ya que no es nada fácil dejar tradiciones y aspectos culturales que son esclavizadores ya que instilan miedo a las personas. Cuando la gente se encuentra con Cristo Jesús se siente fortalecida para no dar lugar a la hechicería en sus vidas. La evangelización que damos intenta iluminar y purificar la cultura del pueblo. Lo que más amo de mi trabajo

Para mí es de suma importancia el trabajar en equipo, con personas con las cuales puedo compartir mi fe pero también recibir de parte de ellos la suya, así como los aspectos enriquecedores de su cultura. Es bien difícil llegar a la misión y querer dar cuando no se conoce a la gente, al pueblo, la realidad; cuando se logra formar un equipo de trabajo es una experiencia bonita pues ésta ayuda a irse integrando en la misión, además, se logran establecer lazos afectivos con la gente con quien se trabaja y eso nos mantiene unidas al pueblo.

Actualmente trabajo en Mangunde, en la escuela familia agraria y en la pastoral.

Situación sociopolítica.

Mozambique es una democracia muy joven ya que la guerra terminó en 1994. El país está gobernado por un partido único: la FRELIMO, el cual intenta hacer lo que puede mientras esté autorizado por el Fondo Monetario Internacional y por los miembros de la Unión Europea. Mozambique es un país con un índice de pobreza muy alto pero sus gobernantes tienen ideas claras sobre lo que quieren: desean superarse y sacar el país adelante. Como ellos mismos dicen: “es hora de sacar al país de la pobreza absoluta e intentar ser un país autosustentable”. Esto no es fácil teniendo en cuenta que es un país muy pobre y endrogado. Podríamos decir que Mozambique es una democracia adolescente, un país en reconstrucción.

Mensaje a los lectores

Jóvenes: no tengan miedo de se felices. Muchas veces se piensa que la felicidad están en las cosas materiales y nos olvidamos que la verdadera felicidad reside en el dar a los demás desinteresadamente, y también en recibir lo que los otros puedan ofrecernos desde lo que son.

Trabajo también en Mangunde en la escuela familia agraria y en la pastoral.

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La Hna. María de los Ángeles estuvo de vacaciones en su casa y regresó a Mozambique hace dos días. Pidamos a Dios por ella para que le conceda todo lo que necesita para seguir siendo su testimonio en aquél país.

DECLARACIÓN FINAL DEL XII ENCUENTRO DE PASTORAL AFROAMERICANA Y CARIBEÑA

L@s 250 participantes del EPA, realizado en Ecuador, delegad@s de 12 países del Continente Latinoamericano y del Caribe, representados en Laic@s, Mujeres, Hombres, Sacerdotes, Religios@s, Diáconos, Jóvenes y Obispos de 12 países del Continente Latinoamericano y del Caribe, convocad@s por el SEPAC y por la Pastoral Afro Ecuatoriana, después de reflexionar sobre la realidad del pueblo afro en el Continente, iluminados por la Palabra de Dios y las orientaciones del magisterio Continental reunido en Aparecida, y alimentados por el pan y el vino de la Eucaristía declaramos:

Estamos dispuest@s a seguir defendiendo los auténticos valores culturales del pueblo Afroamericano y del Caribe, especialmente de los oprimidos, indefensos y marginados, delante de las fuerzas avasalladoras de las estructuras de pecado manifiestas en la sociedad moderna (DA 532).

Continuaremos apoyando el diálogo entre cultura negra y fe cristiana y sus luchas por la justicia social, e incentivando la participación activa de l@s afroamericanos y Caribeñ@s en las acciones pastorales de nuestras Iglesias y del CELAM (Da 533).

Denunciamos las amenazas    en su existencia física, cultural y espiritual, en  los modos de vida, en  las identidades, en  la diversidad, en su  territorio y en sus proyectos de vida, que sufre nuestro pueblo afro en todo el Continente, por causa de la globalización económica y cultural que pone en peligro nuestra propia existencia como pueblo diferente (DA 90), e instamos a los gobiernos nacionales, a las Organización de Estados Americanos y a las Naciones Unidas a globalizar la solidaridad tomando  las medidas necesarias que promuevan la inclusión, la participación y la justicia social de todos los pueblos, en condiciones de igualdad.

Asumimos  la Misión Permanente propuesta por el CELAM en el Santuario Afro de Nuestra Señora Aparecida, con fe, esperanza y alegría, que nos permita vivir el nuevo Pentecostés eclesial y social, con la fuerza de la juventud, la resiliencia (resistencia) de las mujeres, la ternura  de l@s niñ@s, la calidez de los hombres y la riqueza de nuestros mayores.

Este encuentro pastoral continental está cargado de muchos retos y de grandes esperanzas, motivados por las palabras del profeta Afro, Sofonías que considera que cuando el pueblo se organiza y se deja guiar por Dios, se puede celebrar la fiesta de la vida:  “nuestro Dios está contigo, por ti danzará y lanzará gritos de alegría como lo haces tú, en el día de la fiesta (Sofonías 3,15-17).

Guayaquil, Ecuador, 20 de Julio de 2012

"DE MANTELES LARGOS"

Las Misioneras Combonianas de la Provincia México-Costa Rica-Guatemala tenemos la visita de la Superiora General de nuestro Instituto, la Hermana Luzia Premoli, y de la Consejera General Sor Marina Cassarino, italiana. Sor Luzia es originaria de Brasil y fue elegida superiora general de las Combonianas el 20 de septiembre de 2010, durante el XIX Capítulo General de la Congregación.

Sor Luzia nació en Linhares, ES, Brasil; hizo su primera profesión religiosa en 1983. Después de haberse graduado en Psicología, fue enviada a Mozambique en 1989, donde trabajó en la pastoral educativa de las mujeres, en la formación académica de seminaristas del Seminario inter-diocesano, y en la formación del personal docente. Por ocho años estuvo en aquel país africano. En 1997 regresó a Brasil para trabajar en el noviciado como formadora; en ese tiempo hizo la Maestría en Psicopedagogía con especialización en Counseling. En 2005 fue elegida superiora provincial de su país, Brasil.

Con gusto recibimos en estos días a Sor Luzia en medio de nosotras. Ahora se encuentra visitando las 7 comunidades que componen la Provincia con el fin de animarnos en el espíritu del Fundador. Con ella, todas la Combonianas, estamos haciendo camino para permanecer fieles a la herencia dejada por San Daniel Comboni: el carisma ad-gentes vivido entre los más pobres y abandonados, y la espiritualidad que se basa en la contemplación de Jesús Crucificado para acompañarlo, amarlo y servirlo en los crucificados de hoy.

Con Sor Luzia, caminamos todas juntas hacia el HORIZONTE, como ella lo remarcó al iniciar su servicio: "Un discípulo preguntó a su maestro: Maestro, ¿para qué sirve el horizonte? Me acerco dos pasos y él se aleja dos pasos. Hago diez pasos y el horizontge de desplaza diez pasos. Por mucho que camine nunca lo alcanzaré. ¿Para qué sirve?" El Maestro respondió: "exactamente para eso: el HORIZONTE sirve para caminar y después para seguir caminando..." (cf. E.Galeano). "A lo largo del camino habrá momentos en los que nos sentiremos más cercanas, otros más lejanas del HORIZONTE, pero estamos seguras de que ninguna podrá decir: he llegado, puedo pararme, o bien: no llego, desisto. NO. Lo importante es mantener el ritmo...En efecto, el HORIZONTE se desplaza para desafiarnos a mantener el paso, a estar siempre en camino, dejando resonar una vez más la invitación-mandato de nuestra querida Madre General, sor María Bollezzoli: "Adelante, adelante..."

La Provincia de México-Costa Rica Guatemala sigue adelante porque seguimos creyendo en el carisma comboniano, que es una riqueza para aportar al mundo y a la Iglesia Misionera.

EL VALOR DE CONFIAR EN DIOS

Sor Isabel Pinho Gomes, originaria de Arada (Ovar), nació el 1° abril de 1981. A pesar de su juventud, Isabel había ya hecho experiencia de vida misionera en África. Interpelada, nos cuenta en qué modo Dios entró en su vida, llamándola a ser su misionera.

      “Nací en el pueblecito de Arada, en Portugal, de una familia de siete personas: los padres, la abuela materna y dos hermanas. De  estas, Carla era la menor y Dulce la mayor.Mi padre trabajaba en una fábrica, mientras que mi madre cuidaba de nosotros, de la casa y de los campos. Y como el sueldo de mi padre no bastaba  para mantenernos a todos, también nosotras las chicas, ayudábamos en los trabajos agrícolas y además íbamos al mercado con la abuela para vender algunos productos. De este modo colaborábamos a la economía domestica y aprendíamos a crecer con responsabilidad. 

Aunque si ni fue siempre fácil, conseguí frecuentar la escuela hasta el  año 9°. Luego, me inscribí en la escuela nocturna para  poder trabajar en casa y en los campos durante todo el día. En el 1998, mientras frecuentaba el catecismo para prepararme a recibir la confirmación, llegaron a mi parroquia las Hermanas Misioneras Combonianas para hablarnos de las misiones. Al final nos dejaron con una pregunta que me dejó inquieta: “¿Cómo es posible que, no obstante de encontrarnos a las puertas del siglo XXI, haya todavía tanta gente en el mundo que no ha oído nunca hablar de Jesucristo?”La pregunta se quedó impresa en mi corazón. Entonces, siendo ya auxiliar de catequesis y acólita, pensaba hacer lo suficiente para hacer conocer a Jesucristo.  

A la invitación de las misioneras respondió primero la menor de mis hermanas, que decidió ir a Oporto para participar a un encuentro para jóvenes  que manifestasen signos de de vocación misionera.  Por curiosidad, quise también ir yo. Aquel día escuché la Palabra de Dios y conocí el carisma comboniano. Noté en mí el deseo de conocer mejor a  Daniel Comboni y los motivos que lo empujaron a consagrar su vida por la amada África.  Siguieron tres años de reflexión, durante los cuales traté de conocerme mejor. Cuanto        

más entraba en mí misma y tomaba conciencia de mis defectos y de mis fragilidades, mayor temor tenía de responder a la llamada de Dios. Retrasaba así el momento den la decisión, tal vez con la esperanza de que me pasase y no pensarlo más.  

Pero llegó el día en el discernimiento vocacional me dijo,  con firmeza y sin rodeos, que el tiempo de la prueba había llegado a su fin y que tenía que decidirme. Fu una sacudida saludable. Preocupada, busque una respuesta y la encontré en la  Sagrada Escritura: “No son los sanos los que necesitan al médico, sino los enfermos; no he venido para llamar a los justos sino a los  pecadores” (Mc 2,17).  Me sentí invadida por un sentimiento de confianza serena y decidí hablar con mi familia, para escribir a las Hermanas y hacer mi petición de admisión al Postulantado.

El 1° de septiembre del 2001 dejé mi casa para ir a vivir con las misioneras en la comunidad de Oporto, y comenzar así mi formación, de dos años, como  postulante de las misioneras combonianas. En el 2003 dejé Oporto y partí para Brescia (Italia) para continuar el camino formativo como novicia. Aquel fue un tiempo de oración y de reflexión muy bello, que duró dos años.

Al final del noviciado emití mis primeros votos temporales (seis años) de castidad, pobreza y obediencia. Veía ya concretarse cada vez más el sueño de la misión en África. Pero todavía fue necesario ir a Londres durante otro año y medio para estudiar el inglés. Finalmente, en junio del 2007, llegó mi momento de partir para Kenia. Allí comencé a  trabajar en  la promoción de un grupo de mujeres, ayudándolas a conseguir a conseguir una forma de vida más digna de hijas amadas de Dios. Esta experiencia ha hecho más sólida mi vocación, ayudándome a  comprender mejor el don recibido. Nunca he tenido dudas, y he pedido ser admitida a los Votos perpetuos, o sea de permanecer en la Congregación no por uno, dos, tres o seis años, sino para siempre.

Para prepararme a un paso tan importante, permanecí en Italia durante dos meses con otras once hermanas, jóvenes como yo y que habían llegado de varios países de misión. Fue un tiempo de gracia que nos preparó mejor a la emisión de los votos perpetuos, o sea, a la consagración perpetua a Dios para la Misión, según el ideal de Daniel Comboni. Cada una de nosotras ha luego organizado su fiesta  en la respectiva parroquia de origen. Mi gran día fue el 8 de enero del 2012.

Acompañada por mi familia, por las hermanas combonianas y por muchos amigos y conocidos, he dicho “Sí” a Dios para vivir y trabajar con Él todo el resto de mi vida. Fue un día muy bello y lleno de emociones. Siento y vivo la felicidad de pertenecer, simultáneamente, a dos familias: a la que me ha dado la vida y me ha iniciado con amor al conocimiento de Dios; y a la gran familia de las Hermanas Misioneras Combonianas, con as que deseo recorrer los caminos de la misión, anunciando con mi vida el amor de Dios. A esta llamada yo respondo libremente, con la gracia de Dios.

Quiero conservar en mi corazón la luz de este día para hacer memoria de la gracia que me ha sido concedida y para encontrar la fuerza  en los momentos difíciles que ciertamente vendrán, porque “las obras de Dios nacen y crecen a los pies de la Cruz” (Daniel Comboni).

Dios está siempre a nuestro lado para guiarnos por el camino seguro. Tenemos solo que escucharlo y dejarnos conducir de su mano.

CARTAS DESDE LA MISION: SEGUIMOS ESPERANDO

                                                  SEGUIMOS ESPERANDO

Querid@s amig@s: Llevo ya algunas semanas sin compartir con vosotros.La razón de ello es que iniciando en este tiempo mi servicio en las escuelas para los Sudaneses, mi tiempo y mi energia van casi en su totalidad para ellos. En estas semanas hemos estado preparando la escuela de verano.Hemos tenido un taller de preparación con los maestros y después nos hemos dedicado a preparar el material que usaremos en ese mes . Poco a poco voy conociendo como es su vida aqui en Cairo, cuales son sus dificultades,  sus alegrias y  sus deseos y sueños. Quien lo ha experimentado en su propia piel sabe que cosa significa ser un inmigrante. Muchos sueñan con regresar al Sur Sudán pero conociendo las dificultades que su nación está viviendo, han decidido permanecer por algún tiempo en Egipto, por el bien de sus hijos e hijas. Saben que en su pais la educación y la sanidad son aún muy precarias.

Esta semana hemos tenido otro taller de formación para los maestros que en nuestras escuelas( para Egipcios, Sudaneses y otros, de la Familia Comboniana) trabajan en el programa  educativo intercultural , ayudando a los niños-as a abrirse al otro, a acogerlo y a compartir con él. 

Para mi ha sido muy lindo el ver como profesores Egipcios y profesores Sudaneses,  trabajaban juntos en la preparación del programa educativo intercultural, después de haber  recibido formación- información por parte de un psicólogo, sobre la importancia que tiene el conocernos bien para poder acoger al Otro en su alteridad.

Esta mañana durante la Eucaristia , el sacerdote nos decia que no teniamos que temer el resultado  que estabamos esperando .... Que nuestra Esperanza es Jesús, y que Él a través de Su Espiritu, irá guiando todo, hasta nuestros errores y los de otros también, para al final transformar el todo en un bien para nosotros como humanidad. Estas palabras me están ayudando a vivir con ESPERANZA la situación en Egipto en estos momentos. Pero ciertamente seguimos necesitando mucha oración y por ello os pido de continuar rezando por este pueblo. Hoy, hemos celebrado la fiesta de S.Juan Bautista, quien recibió de Dios la llamada a preparar el camino al Señor.... y cada uno de nosotros es también llamado a hacer lo mismo, aunque si en lugares, tiempos y situaciones diferentes.... Que Su Espiritu nos ayude a vivir esta llamada con alegria y pasión! 

Posted 11 hours ago by Expedita Pérez

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